La Fotografía Macro o Macrofotografía es una modalidad o categoría que vino a ofrecernos una perspectiva ampliada de la belleza de seres, individuos y objetos. ¿Quién no ha dejado de maravillarse por todo lo que el mundo tiene que ofrecer ante nuestros ojos? Una de las facultades más prodigiosas que nos ha regalado la naturaleza es la capacidad de percibirla visualmente.
Frecuentemente no dejamos de deleitarnos frente a formas, colores y texturas afines a la cotidianidad de nuestra vida. Imagínate la posibilidad de aproximarlos y contemplarlos a detalle. La verdad que nuestra capacidad de asombro no se agota frente a un mundo miniatura que usualmente pasa desapercibido en el devenir de nuestras vidas.
Por ello la fotografía macro nos regala la oportunidad de apreciar y visualizar aquellos detalles que pasan totalmente desapercibidos por nuestro campo visual cotidiano, y poder así contemplar las maravillas diminutas del mundo que nos rodea. Sigue leyendo y aprende más sobre este tipo increíble de fotografía.
Tabla de Contenidos
¿Qué es la fotografía macro?
La fotografía macro es aquella que descubre y expresa la belleza de las cosas pequeñas, se centra en fotografiar cosas pequeñas con mucho detalle, o detalles de cosas más grandes. Aproxima en el plano la apariencia de los sujetos, sus formas, texturas y colores las cuales son poco perceptibles a la distancia del ojo real.
Etimológicamente la palabra «macro» significa grande. La finalidad de la macrofotografía es engrandecer lo minúsculo, ampliar el tamaño de sujetos y objetos que en la vida real son pequeños. Ver ampliado en todo el encuadre el tamaño de un insecto, la apariencia textural de ciertas flores y el plano detalle de características poco perceptibles de objetos de tamaño regular, causa sorpresa ya que no deja de cautivar el apreciar aquello que no podemos ver a simple vista. Esta virtud de captar las imágenes a una proximidad extrema la aporta la Macrofotografía porque maxifica con lentes y accesorios especiales ya que es lo que la fotografía dispone para ello.
Este tipo de fotografía desde su invención y aplicación contribuyó a los avances de los estudios de la Biología, la Zoología y la Botánica ya que la captura de la imagen en mayor tamaño de especies animales y vegetales pequeñas, favoreció el estudio de sus características y su clasificación. Así mismo realizó sus aportes a la Numismática con la fotografía macro de monedas antiguas, además de joyería valiosa y objetos antíquisimos captados y ampliados en toda su expresión.
Recomendaciones para hacer Fotografía Macro
Antes de hablarte de las herramientas o accesorios utilizados en la macrofotografía, sería importante enumerar una serie de recomendaciones a seguir para realizar fotografía macro.
Elige bien el motivo
En primer lugar es importante decirte que debes elegir el motivo. Si, has leído bien ya que esta primera elección corresponde más a la atención del «motivo» que a la noción de «composición». Esta última premisa se ajustará intuitivamente atendiendo en primera instancia a la forma y luego el fondo que rodea al modelo, el cual se desdibuja complementando la imagen.
Si eliges dos o tres modelos en un mismo encuadre debes valerte de lentes con muy buena resolución macro que capten algo más del entorno y lo incorporen a la escena donde se desenvuelve los individuos, en donde la ley de composición de la imagen juega un papel primario. Pero volviendo al trabajo con un solo modelo digamos que la apariencia textural y el colorido de una flor o la forma de un insecto captados en una fotografía con un tamaño más grande que el real, en sí mismo lleva implícito el concepto de composición.
En Fotografía macro por lo general lo que rodea al motivo captado, el fondo, sale fuera de foco ya que el modelo será tu centro de interés y ocupará casi todo el plano de la foto. En este tipo de fotografía lo ideal es destacar el sujeto y esto se logra reduciendo la profundidad de campo ajustando el diafragma.
En otro entorno que no sea el natural si debe cuidarse el fondo aunque sea desenfocado porque las formas desdibujadas y opacas se conjugan en el juego compositivo de la imagen que puedes acomodar a voluntad antes de capturarla. Una vez que haya captado tu interés y elegido el motivo debes realizarle un acercamiento extremo en el plano con tu cámara. Practica varias tomas y ángulos para explorar sus posibilidades como modelo para este tipo de fotografía.
Ten un buen equipo fotográfico
Si estás iniciándote en esta modalidad son muchas las cosas a considerar como la compra de lentes macros y teleobjetivos para tal fin. Resultarán onerosos, más si embargo, la falta de ellos no puede detenerte en comenzar por hacer ciertas tomas para que vayas comprendiendo la técnica de este tipo de fotografía y los sujetos ideales para captar en una macrofotografía.
Recuerda la perspectiva de la imagen
Elegido tu motivo debes planificar desde qué perspectiva o ángulo tomarás la foto; un picado o contrapicado; las condiciones de luz natural, las atmosféricas y el uso de luz artificial; si está en reposo o movimiento. Esta experimentación romperá con las tomas convencionales y tendrás como resultado tomas más originales.
Iníciate realizando las capturas próximas al sujeto con un objetivo normal mientras te equipas con un objetivo macro. La práctica hará el maestro. La profundidad de campo no es más que el espacio restante que hay por delante y detrás del modelo que se encuentra dentro del foco. Ésta se reduce en la macrofotografía por lo que siempre debes planificar tu encuadre. Alguna variación en ello con un leve ajuste arruinará la foto porque trabajarás con un encuadre o plano de enfoque muy estrecho.
Inspírate
Puedes valerte de la observación y la exploración para variar los ambientes a fotografiar donde otros sujetos pernoctan, como por ejemplo esporas y hongos. Ampliarás así tu conocimiento de mundos insospechados. En la práctica irás corrigiendo los problemas que se presentarán con el enfoque y el uso del flash que podrás emendar en la edición. Esto puede servirte para realizar tus primeras tomas en este minúsculo mundo de la fotografía macro.
Limpia lo que estorba
En el proceso de cuadrar el ángulo y antes de realizar la captura despeja todo lo que «ensucie» la toma. En ese mundo miniatura ampliado con un lente, todo se maxifica incluso lo ajeno al motivo a fotografiar. Debes proveerte de pinzas y pinceles para barrer y quitar con suma delicadeza todo lo que estorbe, sin estropear ni arruinar el momento que quieres captar del sujeto
No olvides la iluminación
En lo que respecta a las condiciones de luz natural estudia bien la cantidad de luz que le llega al sujeto para considerar proveerte de linternas. Ilumina tu motivo. Es importante recordar que al trabajar con una profundidad de campo reducida producido por un diafragma cerrado, la entrada de luz igual se reduce por eso es vital el uso de luces auxiliares. Igualmente debes incorporar el uso del flash y un difusor que coloques entre el flash y el sujeto para suavizar el golpe de luz.
Evita movimientos
Elimina las vibraciones que puedan arruinar la toma. Nuevamente incide aquí el hecho de que al trabajar con capturas muy cercanas al modelo se reduce la profundidad de campo. El uso de un diafragma cerrado amplía ésta teniendo buenas condiciones de luz. Así que evita cualquier movimiento o vibración ya que sacará del enfoque a tu modelo, a menos que la escaza profundidad de campo la uses a tu favor en lo creativo.
Elige un punto focal en tu motivo. El fondo junto a lo restante de él salen de foco con un aspecto borroso, haciendo una composición contrastante y llamativa con la nitidez parcial del modelo. Trabaja con velocidades altas de obturación mientras te entrenas. A medida que uses y adquieras experiencia con el uso del flash puedes bajar la velocidad de obturación. En cuanto al enfoque siempre se recomienda trabajar de preferencia con el enfoque manual aunque hay situaciones imprevistas y de rapidez en la macrofotografía que amerita recurrir al enfoque automático. Más sin embargo, trabaja con el manual, solo debes entrenarte en cuadrarlo rápidamente cuando requieras realizar el enfoque.
Usa el trípode para ciertos modelos
En cuanto a la decisión de trabajar con el trípode es opcional ya que si tienes individuos en movimiento o donde las condiciones de viento inciden en la variación de las escenas, no es buena idea colocarlo porque te tomará tiempo ubicarlo y perderías buenas oportunidades de captura.
El trabajar con modelos animales implica estar al acecho para esperar el mejor momento sabiendo que puede durar apenas instantes por lo que se recomienda portar tu cámara, guindada sobre tu pecho ya preparada. En situaciones donde haya inmovilidad y el modelo nos asegura quietud si puede utilizarse, además si realizas las tomas con un teleobjetivo y con velocidades de obturación de exposición prolongada. Necesitarás un disparador por cable para pulsar el disparador. Esto asegura reducir al mínimo la vibración. Si no es posible contar con él utiliza el disparador automático.
¿Qué necesito para fotografía macro?
Cámara
En tiempos donde se usaba cámaras compactas existía lo que llamábamos «falso macro» y ésta se ubicaba en el equipo con un símbolo representado con una flor. Esta función brindaba el acercamiento del modelo pero no con la dimensión con la cual conocemos hoy día la foto macro como tal. La Macrofotografía comienza realmente con el uso de la cámara réflex y no es precisamente ésta la que aporta la característica sino es el tipo de objetivo a utilizar.
En cuanto a la cámara a utilizar, hoy día los fotógrafos macro prefieren las que son de objetivos intercambiables y esa es la verdadera esencia de la fotografía macro. Los sistemas DSLR y los sin espejos son igualmente llamativas para esta labor.
Objetivos macro
Para iniciarte ya de una forma más técnica y profesional, es necesario valerte de un objetivo macro ya que fotografían al modelo en tamaño real. Esta herramienta estará en un rango macro de 30 cms o menos, logrando captar el motivo con total nitidez.
Anillo adaptador
Si aún estás a la espera de comprarlo, puedes adquirir un anilllo para adaptar la inversión del objetivo normal de la cámara la cual le dará el efecto macro deseado. Estos son anillos adaptadores que se adaptan a cualquier objetivo utilizado, abaratando la inversión pero el resultado es muy distante al que te ofrece un lente macro real.
Lentes conversores
También existen los llamados lentes o filtros de aproximación de forma planoconvexa que se adaptan enroscándolo por delante del objetivo de la cámara, aumentando la imagen según el número de dioptrías. Su deficiente fabricación incorpora distorsiones en la imagen por lo que se recomienda para el uso exclusivo de aficionados.
Existen otros llamados objetivos de aproximación que en funcionamiento se parecen al lente anterior, con la diferencia que son un par de lentes acromáticos que corrigen las distorsiones aportadas por los lentes de aproximación tradicionales pero su rango de acercamiento sigue siendo escaso y de alto costo por lo que no gozan de mayor uso entre los fotógrafos profesionales.
Otras formas de resolver una lente macro es el de acoplar dos objetivos mediante un anillo parecido a un filtro con roscas en ambos extremos que facilitan la adaptación de los mismos. Uno, se ajusta a la cámara y el otro en posición invertida. Este acoplamiento funciona como si se usara lentes de aproximación.
El segundo objetivo cumple la función de un filtro que da como resultado una buena calidad óptica. En general la combinación más utilizada es de un teleobjetivo unido gracias al anillo a un gran angular que funciona como objetivo de aproximación. Todo depende de la combinación realizada para obtener la calidad de la imagen deseada.
Tubos de extensión
Para también aumentar la distancia focal y por ende agrandar la imagen, se utiliza un fuelle o tubo de extensión solo en cámaras con objetivos desmontables. Es un accesorio que brinda la posibilidad de alejar el objetivo a la cámara. Son espaciadores cilíndricos huecos que van entre la montura de la cámara y el objetivo para aumentar la longitud y desplazar el objetivo al sujeto.
Otra formas de objetivos de aproximación tiene que ver con lo que se conoce como supermacro y que pudieramos decir que toca los linderos de la microfotografía. Igualmente acortan la distancia focal pero con una resolución extraordinaria parecido en su forma a los microscopios.
Por último pudieras lanzarte a descubrir temas abstractos con la fotografía macro. Cierto que su práctica ha permitido develar un mundo interesante. Así que no dejarás de sorprenderte cuando descubras formas, texturas y colores que se asocian rítmicamente en una composición jugando con la oposición llamativa que aporta al conjugar lo nítido con lo opaco, lo rugoso con lo liso. De esta manera quedarás definitivamente anclado a explorar tu capacidad creativa con las posibilidades que te brinda la Fotografía Macro